lunes, 13 de junio de 2011

Agustín

Biografía de Agustín de Hipona
Aurelio Agustín nació el 13 de noviembre de 353 en Tagaste[1] provincia de Numidia Cirtense  en África. Fue hijo de Patricio* un “pagano” y de Mónica que era “cristiana”[2]. Tuvo dos hermanos Navigio y Perpetua[3]; refiere  Posidio* que Agustín era el hijo “más vivaracho, el más bullicioso y torrencial”[4]. La  madre de Agustín,  Mónica  “lo inició en el cristianismo”[5], siempre “[6] influyó en Agustín con la doctrina, el ejemplo y la plegaria”.
En Tagaste estudió gramática, y en Cartago retórica[7]; se trasladó a Madaura en 365 pero “el ambiente pagano le hizo echar en olvido de la fe cristina".[8] Su padre murió en 373[9]
 Convivió con una mujer durante quince años[10] pero  está  “volvió a África”[11], y Agustín quedó “desgarrado y vulnerado”[12]; de esta relación  tuvo un hijo llamado Adeodato[13], quien permaneció con el[14].
Agustín leyó el “Hortensius” de Cicerón[15], lectura que “le impresionó profundamente, [y] despertó en él el genio por la filosofía”[16]. Pero se “desilusionaba”[17], pues en Cicerón, dice Agustín “no figuraba allí el nombre de Cristo”[18]a quien el “conservaba en lo más profundo“[19].  Leyó la Sagrada Escritura, aunque “sin acertar a comprenderlas”[20], pues “no se encontraba en condiciones en poder de entrar en ellas ni de inclinar la cerviz para caminar por ellas parecieron indignas de compararse con la dignidad de Cicerón”[21]
En Cartago se unió[22] a los maniqueos,* durante diez años[23], desde su adolescencia “le habían contagiado los maniqueos por algún tiempo con sus errores”[24] por eso, le interesó seguir  “todo lo relativo al pro o contra de aquella herejía”;  entre ellos conoció al obispo  Fausto[25], al que Agustín describe como un “gran lazo del demonio en el  que muchos se dejaban atrapar por el hechizo de una suave elocuencia”[26] . Pero  poco a poco y a la edad de 29 años los abandonó[27] pues “no tenía ya esperanza de poder aprovechar en esa falsa doctrina”[28], además el filósofo “observaba con más desgana y negligencia,”[29] lo que provocó que se fuera “debilitando la fe de Agustín en el maniqueísmo”[30].
 Después se interesó por la Academia Nueva*, donde  empezó “a dudar  de todo”[31], dando como resultado un “desencanto intelectual”[32], y a causa de estas ideas sufrió una “depresión de ánimo de desengaño y desconfianza”[33]. Aunque “no cayó en el escepticismo total”[34].
Leyó a Plotino, en especial algunos escritos de las Eneéadas[35],  lo cual le acercó a la filosofía neoplatónica la cual “tuvo el efecto de sanarle de su escepticismo”[36], por que estimó a la filosofía  platónica,[37]  “por encima de las demás”.[38]
En Roma  abrió  en 383 una escuela de retórica  y un  año más tarde obtuvo la cátedra municipal  de retórica en Milán,[39] donde escuchó los sermones de Ambrosio[40] , quien “tanta parte había de tener en su conversión “[41]. Hacia 386  Agustín encontro en “el cristianismo la verdad que ambicionaba”[42] y abandonó temporalmente la cátedra retirándose a la villa de Verecondo  en Casiciaco en los alrededores de Milán en compañía de unos amigos, esto “para prepararse  para el bautismo”;[43] tenía treinta y tres años, cuando fue bautizado por Ambrosio junto a su hijo Adeodato, Alipio y otros compañeros por Ambrosio[44]. “De la meditación es esta villa y de las conversaciones con sus amigos”[45], nacieron  sus primeros escritos: Contra Académicos, Del orden, Sobre la felicidad y  Soliloquios[46]
En 387 regresó Roma en ese mismo año murió su madre en Ostia[47]; Agustín  volvió a África en el otoño de 388 y residió en Tagaste hasta el 391[48] donde fundó un monasterio en el que  vivió en compañía de amigos y discípulos[49]. En 391 Agustín fue ordenado sacerdote y  se trasladó a Hipona donde fundó otro monasterio. Cuatro años más tarde, en 395[50] fue nombrado obispo auxiliar de Hipona[51] y cuando murió Valerio, Agustín le sucedió como Obispo, cargo que ocupó hasta su  muerte.”[52]
En el 410 viajó a Cartago con su amigo Celestio[53] quien “fue excomulgado por el concilio de Cartago”  y condenado en el 418  por pelagianismo en África[54].
En el 426 Agustín  “sintiendo debilitadas sus fuerzas”[55] nombró a Heraclio “auxiliar y sucesor”[56] pero “su pecho se resintió”[57] , tuvo  “dificultad de respiración, el dolor de pecho, la pérdida  y atenuación de voz”[58].
Pasaron de España a África [59]  “tropas de Genserio* [que] asediaban a Hipona”[60] . Y el 28 de agosto del 430 murió Agustín durante el asedio de la propia cuidad[61]. Ningún testamento dejó[62]. Se hizo “un sacrificio ofrecido a Dios por la deposición de su cuerpo y fue sepultado”[63].
Corpus Agustinicu
La filosofía de Agustín  se vio influenciada por las obras de Platón, Aristóteles, Cicerón, Porfirio, Varrón, Séneca, Lucrecio, Apuleyo y Cornelio Celso, [64] y de igual manera influyeron Ambrosio y las epístolas paulatinas.[65] 
Tuvo gran interés por “el enriquecimiento y organización de las bibliotecas eclesiásticas, Después de su muerte,  su biógrafo Posidio  hizo un Indiculus, es una catálogo  o lista de las obras agustinianas.[66] “El Indiculos de Posidio sigue al que tenia Agustín en su biblioteca.” [67]Además  el biógrafo catalogó las cartas y los sermones del filósofo[68], esto durante  el asedio de  Hipona  que fue entre junio del 430 y el agosto del 431. La conservación de la biblioteca del filósofo fue salvada durante el  incendio  que ocasionaron los barbaros a Hipona además contenía todas las obras y escritos de Agustín.
De acuerdo a su materia las obras de Agustín de Hipona  se agrupan de la siguiente manera.
Escritos Filosóficos
Contra académicos (386) contra el escepticismo de los académicos. Busca la verdad de las cosas.  Agustín “se esfuerza por afirmar sobre bases sólidas el fundamento de nuestra certeza, [69]” .
La vida feliz (386); Conseguida mediante la búsqueda de Dios, “la vida feliz consiste en el perfecto conocimiento  de Dios”[70] y “la pureza  es siempre condición indispensable  para la posesión y contacto divino,”[71] por lo cual la felicidad “no consiste en la posesión y disfrute  de ningún bien creado y transitorio, sino del bien absoluto  y perfecto”[72].
Del orden, (dos libros) (386); esta obra es “el primer intento de sondeo de los problemas del universo, y en ellos se manifiesta un agudo sentimiento de la naturaleza”[73]Agustín “todo lo dirige la divina providencia”[74] y “el orden siempre lleva a Dios por el doble camino de la contemplación de la práctica moral.”[75]  En “el segundo libro  trata sobre sutiles disquisiciones acerca del sabio y su forma de unión con Dios”[76]
Soliloquios, (dos libro) (387); el texto es una  plegaria[77], mediante la cual Agustín busca “la libertad de su espíritu por la gracia”[78]
Del libre albedrio, (tres libros) (388-395);
De la cualidad del alma  (387-388);  el punto central, la inmaterialidad del alma y “las relaciones entre alma y cuerpo”[79]
El maestro (389)
Confesiones. (400);  autobiografía de Agustín en la que se “va ascendiendo por grados hasta llegar a Dios”[80].
Naturaleza y origen del alma. (405)
Naturaleza del bien. (415 Refuta los errores del maniqueísmo, busca demostrar “que Dios es inmutable por naturaleza y que es el sumo o soberano Bien; que todas las demás naturalezas, sean espirituales o corpóreas, vienen de él, y todas, en cuanto naturaleza, son buenas.”[81] 
Escritos Apologéticos[82]:
La verdadera religión. (389-391) – Las costumbres de  la iglesia y las de los maniqueos (388). - Manuela de fe, esperanza y caridad. (413) – Carta a los católicos sobre la secta donatista.(la unidad de la iglesia( (402) – La fe en la que no vemos. (400) – Utilidad de la fe. (391-392) – La trinidad. (400 -416)
 La Ciudad de Dios. (413 -426) La obra destacada de Agustín  es La Ciudad de Dios (413 -426) escrita durante su vejez, trata temas muy diversos como la naturaleza de Dios, el martirio o el judaísmo, el origen y la sustancialidad del bien y del mal, el pecado y la culpa, la muerte, el derecho y la ley, la contingencia y la necesidad,  el tiempo y el espacio, la Providencia, el destino y la historia
Escritos Antipelagianos*[83]:
Tratados sobre la gracia.  – El espíritu y la letra. (412) – La naturaleza y la gracia. (415 )– La gracia de Jesucristo y el pecado original.  - La gracia y el libre albedrio. (426 -427) - La corrección y la gracia. (426 -427) -  La predestinación de los santos. (428) - El don de la perseverancia.(428 -429) - Tratados sobre la gracia. – Cuestiones diversas de Simpliciano. (396 -397) – Consecuencias y perdón de los pecados, y el bautismo en los niños. – Réplica a las dos cartas de los pelagianos. (420) – Las actas del proceso a Pelagio. - La perfección de la justicia del hombre. (415)- El matrimonio y la concupiscencia. (420) – Réplica a Juliano. (Obra inacabada, libros I – III) – Réplica a Juliano (Obra inacabada, libros IV –VI)
Sermones[84]:
1° Sobre el antiguo testamento. (1 -50:) - 2° Sobre los Evangelios sinópticos. (51 -116:) – 3° Sobre el Evangelio de San Juan, Hechos y cartas de los Apóstoles. (117 -183:) – 4° Sobre los tiempos litúrgicos. (184 -272 B:) – 5° Sobre  los mártires. (273 -338:) – 6°Sobre temas diversos. (339 -396:) –  7° Índices bíblico, litúrgico y temático de los Sermones.
Cartas[85]:
(1°) 1 -123.  - (2°) 124-18º 7. – 3° 188- 270.
Escritos Morales[86]:
La bondad del matrimonio. (414) – La santa virginidad.(400 -401) – La bondad de la viudez.– La continencia.(394 -395) – Las uniones adulterinas.(419)- La paciencia. (418) – El combate cristiano. – La mentira. (394 -395)– Contra la mentira. – El trabajo de los monjes. – El Sermón de la Montaña.

Escritos Homiléticos[87]:
1° Tratados sobre el evangelio de San Juan. (1 -35, Jn. 1,8 -14) – 2° Tratados sobre el Evangelio de San Juan. (36-124, Jn 8, 15 final) -  1° Comentarios a los salmos. (1 -40) – 2° Comentarios a los salmos. (41 -75) – 3° Comentarios a los salmos. (76 -117) – 4° Comentarios sobre los salmos. (118 -150)
Escritos Bíblicos[88]:
La doctrina cristiana. (396 -397) – Comentario al Génesis en réplica a los maniqueos. – Comentario literal al Génesis (incompleto) – Comentario literal al Génesis. – Exposición de algunos textos de la carta a los romanos. – Exposición incoada de la Carta a los Romanos. – Exposición  de la Carta a los Gálatas. Tratados sobre la primera Carta de San Juan. Índice temático de los 18 primeros tomos. – Diecisiete pasajes del Evangelio de San Mateo. - Expresiones del Heptateuco. – Espejo de la escritura. –Ocho cuestiones del antiguo Testamento. – Cuestiones sobre el Heptateuco. (419 d. C.) – Anotaciones al libro de Job. (397 - 400) – Concordancia a los evangelistas.
Escritos antimaniqueos*[89]:
Las dos almas del hombre. – Actas del debate contra el maniqueo  Fortunato. –Réplica a Adimanto, discípulo de Manés. – Réplica a la carta de Manés, llamada <<del Fundamento>> (400) – Actas del debate con el maniqueo Félix.(404) – Respuesta al maniqueo Secundino. – Réplica a Fausto, el maniqueo.
Escritos antidonatistas*[90]:
Salmo contra la secta de Donato. – Réplica a la carta de Parmeniano. – Tratados sobre el bautismo. –Resumen del debate con los donatistas. – Réplica a las cartas de Petiliano. (400- 401) – El único bautismo (Réplica a Petiliano). – Mensaje a los donatistas después del debate. – Sermón a los fieles de la Iglesia de Cesarea. – Cartas a los católicos sobre la secta donatista (la unidad de la Iglesia) (402) – Réplica al gramático Cresconio, donatista. – Actas del debate con el donatista Emérito. – Réplica  a Gaudencio, obispo donatista.
Escritos antiarrianos* y otros herejes*[91]:
Las herejías, dedicado a Quodvultdeo. (428) – Sermón  de los arrianos. – Réplica al sermón de los arrianos. – Debate con Maximino, obispo arriano. (428) – Réplica al mismo Maximino, arriano. (428) – A Orosio, contra los priscilianistas y origenistas (415) – Réplica al adversario de la ley y los Profetas. – Tratados contra los judíos.
Escritos varios[92]:
(1°):-La música (387 -391). -La fe y el Símbolo de los Apóstoles. -La catequesis a principiantes.-La fe y las obras. -Sermón sobre la disciplina cristiana.-Sermón a los catecúmenos sobre el Símbolo de los apóstoles.
(2°) Ochenta y tres cuestiones diversas. – la adivinación diabólica. – Respuesta a las ocho preguntas de Dulquicio. - La piedad con los difuntos. – Regla a los siervos de Dios. – Las revisiones. - La utilidad del ayuno. -  La devastación de roma
Escritos atribuidos:*[93]
Principios de dialéctica. - La fe, dedicado a Pedro. -El espíritu y el alma. -El amor a Dios. -Soliloquios. -Meditaciones. -Manual de elevación espiritual. -La escala del Paraíso. -Combate entre los vicios y las virtudes. -Salterio (compuesto para su madre). -Tratado sobre la asunción de María. -Diálogo sobre la contienda entre la Iglesia y la Sinagoga. -Los dogmas de la Iglesia. -Defensa de Agustín por Próspero de Aquitania. -Sentencias de San Agustín recopiladas por Próspero de Aquitania.-Catálogo de los libros, tratados y cartas de San Agustín, editado por San Posidio.

Trabajo  de Agustín de Hipona

·          Principales influencias filosóficas sobre Agustín
La filosofía de Agustín se vio influenciada por las obras de Platón, Aristóteles, Cicerón, Porfirio, Varrón, Séneca, Lucrecio, Apuleyo y Cornelio Celso, [94] y  de igual manera influyeron Ambrosio y las epístolas paulatinas.[95] 
Para el Medievo Agustín de Hipona propuso lo racional,  implemento  la interioridad  católica en la iglesia. Dios es de suma importancia y justo medio para entender las cosas. Es el interiorismo,  espiritualismo y ascensión  a Dios  las propuestas  de Agustín.
El tema central de la  filosofía de Agustín de Hipona, es Dios[96], el alma y la felicidad eterna. Como todo filósofo  quería  encontrar la verdad absoluta, este era su anhelo[97]
El alma juega un papel importante  pues el es sumo bien[98]  y “con su presencia comunica al cuerpo todo”[99], también  a “la vida, que es mejor que todo”. El alma perfecta  será aquella que se someta a Dios[100] como “omnímoda adhesión”[101] además  “la hace sabia y virtuosa”[102].
La razón  la llama  Agustín mente o razón, [103]es  la “más noble  del hombre”[104]  como “porción de ánimo”[105]  y “conviene que se sometan todas las demás que hay en él”[106],  esta es la razón inferior pues se “ocupara de las cosas corpóreas y temporales”[107] por lo cual se encargara de “administrar y gobernar las cosas inferiores”[108]  por las cuales  el alma puede conocer en tanto se hacen presentes por los sentidos además son juzgadas.[109]  “Las razón superior  es la fuente de la sabiduría  son las verdades y razones eternas, sobre las ideas inmutables y las cosas absolutas, necesarias y divinas”[110] El alma racional juzga según sus propias normas”[111]. El alma es creadora de las sensaciones y de las ideas y son determinadas por el alma cuando son recibidas por los sentidos.[112] 
Son cosas distintas la razón y la fe[113], las dos funcionan  íntimamente porque  ”viven  en la más armónica compenetración”[114], no se confunden una con la otra pero viven de “manera inseparable”[115]. Considera que “la insuficiencia de la filosofía halla su complemento en la plenitud de la verdad descubierta por la fe”[116]. Después introducida la fe a la razón, esta no será autónoma  sin la fe[117].  El alma  se suministra de la fe.  La fe no obstruye ala razón[118]  
La fe esclarece a los ojos del alma y la libera de los sentidos[119] por esta razón el alma  puede elevarse al conocimiento inteligible[120] porque “no dotados con la visión somos nutridos por la fe y conducidos a través de caminos practicables, a fin  de hacernos aptos e idóneos de su posesión”[121]
Las aportaciones de Agustín de Hipona a la filosofía  y la religión  en el Medievo fue su enfoque  en el problema teológico el hombre. Busca “la claridad sobre si mismo y sobre su propio destino, el significado auténtico de su vida interior”[122]. Esto es el interiorismo (Teoría de la iluminación), para conocer debe ser desde adentro no hacia las cosas exteriores. Se “necesita estar muy avanzado a separarse de la vida de los sentidos y replegarse en sí y vivir en contacto consigo mismo”[123] esto es conseguido por la soledad y alejado de las opiniones ya que la cura será “las artes liberales”[124].
El  conocimiento de sí mismo es el principio de la sabiduría, esto es, “recogerse en la propia interioridad”.[125] El humano va en busca de Dios y para lograrlo tiene que tener “un anhelo ascensional”[126], elevarse a Dios es la meta. Pues bien dice en sus Confesiones; “y  sucede que donde he encontrado la verdad, allí  he encontrado de mi Dios, que es la verdad misma”[127]
Por lo cual las cosas exteriores solo le interesan porque lo conducen a si mismo y le ayuda a elevarse a Dios[128]. Esto seria la iluminación y comprensión sobre el mismo hombre y el mundo,[129] “De lo exterior a lo interior y de lo interior a lo superior”[130]. Primero las cosas exteriores  y después estas penetran es su interioridad para finalmente  penetrar en el fondo del alma  donde se podrá encontrar la verdad y el bien[131]. Dios esta encima de la memoria del hombre  es muy íntimo y trascendente al hombre.[132]
·         La ciencia
La filosofía es buena siempre y cuando no se oponga a la verdad revelada del Cristianismo[133].  La ciencia es “sino todo aquello que engendra, nutre protege y fortalece la fe saludable que conduce a la dicha verdadera”[134].  
Se entiende que la ciencia es aquella de realidades sensibles e inteligibles y se encarga del “conocimiento racional  y temporales”.[135] La sabiduría es el “conocimiento intelectual de las realidades eternas”[136] e inmutables del mundo suprasensible o inteligible[137].  La importancia de la sabiduría es que a ella le pertenecen las cosas divinas[138]. La ciencia es una etapa inferior  pero necesaria para el conocimiento con el fin de “aspirar a la liberación interior del hombre”[139]. Si se piensa más por las cosas exteriores  lo que busca el alma no lo encontrara[140]
La sabiduría se identifica “primero con la filosofía, luego con la religión finalmente Dios”[141] además la sabiduría “cura los ojos del alma y los dispone a la visión”[142].
Hay distintas ciencias las cuales son tres; unas son rechazables por supersticiosas y otras superfluitas como el teatro y la poesía. Las ciencias necesarias y útiles son; la escritura, el conocimiento  de las lenguas, la dialéctica, la retorica,  la ciencia de los números y las ciencias naturales.[143] Explica que estas ciencias también pueden servir la bien como al mal, pero recalcó que debía ser “utilizada para el servició del bien  y la verdad”[144].
·         La verdad es idealista
La verdad es Dios,[145] el bien, “la realidad suprema y por lo tanto la suprema sabiduría consistirá en conocerlo  y amarlo”[146]
Lo principal de la verdad “reside en el hecho que ella nos revela lo que es en contraste con la falsedad, que nos hace parecer creer lo que es”[147].  En Soliloquios  explica que “una cosa es falsa porque es diversa de lo que parece, la verdad de una cosa consistirá en ser lo que parece”.[148]
La verdad se entiende “lo que es tal como parece”[149] de manera que es “la revelación  del ser como tal”[150] y la percibimos por los sentidos.
Además “permanece siendo la misma”[151]. No aumenta si llegamos más a fondo al conocerla, ni baja su consistencia si nos alejamos, pues “siendo integra e inalterable, alegra con su luz  a los que se vuelven hacia ella y castiga con la ceguera a los que de ella se apartan “[152].
Nuestros juicios es de lo que entendemos de ella, pues ella no puede ser juzgada, como dice Agustín “juzgamos de nuestros mismos entendimientos según  ella,  y a ella  no la podemos  en modo alguno juzgar”[153] por lo tanto la verdad se superior.
La verdad “es una e inconmutable en todos los seres  inteligentes y superior a nuestra mente”[154]  y se presenta como “luz secretísima y pública”[155] se encuentra “pronta y se ofrece en común”[156] porque no es “exclusivamente tuya  o mía”  a además es la única que hace felices a el hombre[157]. Por lo cual es más sublime que nuestro espíritu y que la razón misma [158]
También  es “el ser que ilumina a la razón humana” y da norma de juicio siendo esta la medida  de valoración a las mismas cosas.[159]
La consistencia de la verdad,  “posee el bien sumo”[160] y es sabiduría. Nuestra mente se penetra de ella, es de esta manera que nos apoderamos de su bien y gozamos del sumo bien [161] “en esto consiste también nuestra libertad en someternos en la verdad suprema”[162], y para Agustín libertad es Dios. Al respecto de la libertad  y la verdad dice que  “de ninguna cosa goza el alma con libertad, sino de la que goza con seguridad”[163]
·         El origen del conocimiento 
En las Confesiones Agustín aclara cual es el origen del conocimiento científico pues da una ejemplo como el oír o escuchar, se cuestiona al respecto “si existe una cosa, qué es, y cuál es”[164]. El efecto de la percepción es que “han cruzado vibrado por el aire y ya no existen”[165] aunque “las cosas mismas significadas por esos sonidos”[166], no podrán ser alcanzadas por “los sentidos del cuerpo, ni se han visto en parte alguna fuera de[l] espíritu”[167], por lo tanto se han  “guardado” en la memoria, no las imágenes, sino a ellas mismas[168].
La memoria juega un papel importante, en ella se encuentran todos los conocimientos adquiridos, como la literatura el arte el discurso[169]. La memoria es “un lugar interior que no es lugar”[170]. Las cosas sensibles afectan los sentidos del hombre y la memoria  hace una imagen.
Se hace una pregunta importante “¿de donde han venido y por dónde han penetrado en mi memoria? Porque cuando fueron aprendidas, no se [dio] crédito a un corazón ajeno, el mío”[171],  …dice Agustín, “donde las reconocí y fueron aprobadas por verdaderas”[172]
Es muy grande el poder de la memoria[173] pues Dios esta en la memoria “y sucede que donde [se ha] encontrado la verdad, allí [se ha] encontrado a… Dios, que es la verdad misma”[174] dice el filósofo “donde, pues, te encontré para conocerte sino en ti mismo sobre mi.”[175]
·         “Si yerro sé que existo”
La existencia es entiende como la certeza primaria[176] , “si yero, sé que existo”[177] es la afirmación de nuestra propia existencia pues no se puede dudar de esta racionalmente[178] “todo el que conoce su duda, conoce con certeza la verdad, y de esta verdad que entiende, posee la certidumbre” [179] pues quien duda  de “la existencia de la verdad, en si mismo halla una verdad en que no puede mellar la duda”[180]. Y “¿quien duda que viva, recuerda, entiende, quiere, piensa, conoce y juzga?, puesto, que duda , vive; si duda, recuerda su duda.”[181]
·         La utilidad de creer  Agustín  refuta los errores del racionalismo
Los maniqueos fueron parte de la enseñanza de Agustín pues los errores del maniqueísmo le ayudaron a entender la filosofía y recobrar el sentido de lo racional como la fe misma. El maniqueísmo fue una religión que tomada como fundamento extremista el mal  y el bien como constante lucha de contrarios.
Dios es absoluta unidad y unicidad[182], solo hay un solo Dios[183] y es principio de todo  esta presente en todo porque  es inmenso.[184] Es la verdad por esencia [185]
Agustín decidido a defender a la iglesia y la fe, ya que el maniqueísmo se mofaba de la iglesia católica[186] además atacaba al Antiguo Testamento,[187] porque no es entendida por los ignorantes y disipados [188]así juzgaba Agustín a los maniqueos. Los libros del Antiguo Testamento son buenos,  por lo que los maniqueos no admitían la mala interpretación que le daban[189].
“La iglesia católica exige a los vienen a ella fe; los herejes prometen razón”[190] cree Agustín que  “es imposible  encontrar la religión verdadera  sin una autoridad y  una fe previa”[191]  es la “fe el medio para conocer el adoctrinamiento”[192]
Dios es incorruptible[193], por cuanto es el mismo el filósofo refutaba el pensamiento de los maniqueos, tenían como el principio el mal, “no solo una realidad sino como principio substancial  del mundo”[194]. A lo que  Agustín responde: Dios es la bondad perfecta[195] y “todo lo que es, en cuanto es, es bien”[196]. Niega  el filósofo totalmente  que el mal sea principio  de la realidad como la sustancialidad del mismo mal[197]
Además decía que “avanzados y extraviados a las cosas coparías, piensan que la única realidad auténtica es lo que percibe por los cinco sentidos”[198] porque se valen de “una regla torpe y  falaz”[199]  pues solo tienen las imágenes y las cosas percibidas[200] .
El error que pueden tener al leer lo que es falso y tomarlo como verdadero[201], si es el escritor toma lo falso y lo considera lo verdadero además de ser la fuente principal,[202]  cométete otro error
         ·            Ideas innatas 
En el aspecto teológico Agustín empezó profundizar en “la gracia y daba a la voluntad libre del hombre una parte de iniciativa, como evidente merma de la divina soberanía”[203]. Por recomendación, le dio Ambrosio[204] al filósofo la idea de que estudiará y analizará los textos paulatinos. Después Agustín cambio de opinión y pensaba que debía de quitársele “la voluntad  humana la misma iniciativa y otorgársela  a Dios”[205].  
El innatismo platónico fue rechazado por Agustín como también las ideas innatas y la preexistencia de las almas[206]. Al principio decía que Dios siendo supremo le había dotado de ideas en estado virtual a cada alma,  esta idea cambia por una acción iluminadora de Dios[207].
Teoría de la lliminacvió: esta iluminación guarda “una función creadora y conservadora que Dios ejerce sobre las creaturas.” No es un acto de acción” comunicando de una vez para siempre,  sino de una acción continua durante toda la vida”[208]
La iluminación  se comprende  en un doble sentido por parte de Dios es activa y por parte del humano es pasiva[209]. Dios no es solo la fuente primaria del ser, como ya antes dicho es la fuente de la verdad[210], se comprende “la multitud de las cosas que penetran en la inteligencia, pero no se consulta lo exterior”[211] sino se consulta  lo interior de la verdad “que reina  en el espíritu,[212] en el alma que es Dios mismo. Y le da al alma el sello o la huella le muestra el mundo inteligible al hombre.[213] 
Dios como “luz espiritual, en ti, de ti y por ti se hacen comprensibles las cosas que echan rayos de claridad”[214] como “luz que ilumina todas las inteligencias”[215] siempre “responde a las preguntas del alma”[216]
La certeza “el hombre puede pensar en la naturaleza de su alma y encontrar  la verdad, pero en sí mismo, no en otra parte”[217] pues “¿Qué sabemos, si aquello en lo que hay en nuestra mente, cuando todo lo que sabemos no podemos conocerlo si no es por la mente”[218]  a casusa de esto “nada , en efecto , tan conocido de la mente como aquello que siempre tiene presente, y nada tan presente a la mente como la mente misma”[219].
·         Influencia neoplatónica  en Agustín
En el aspecto filosófico, las ideas del neoplatonismo en sus primeros escritos[220], se vieron plasmadas con “una tensión exagerada entre el espíritu y la carne, entre lo sensible y lo inteligible”[221].
Fue de gran influencia Platón en Agustín el hizo modificaciones a al teoría de las ideas de Platón en forma cristiana[222] con las ideas ejemplares [223]
Una comparación más acertada es que para Platón las ideas están sobre el mundo sensible y son seres reales, personales y superiores al Demiurgo [224] y estas creaban. En Agustín Dios esta por encima de todo[225] y también  ordena  de esta manera : Dios, Uno y Trió  por lo cual es esencia eterna, inmutable e infinita como el Padre, Hijo(verbo)  y Espíritu Santo[226]. Recordando que para Platón es 1° Uno, 2° Logos o Nous y  3°el alma del mundo[227].
Las ideas ejemplares.
Las ideas no están en un mudo distinto de Dios tan poco son superiores de él, son las mismas ideas existentes  en su inteligencia eterna y consustancial (Verbo)[228]
Origen del conocimiento:
Las cosas son inteligibles y verdaderas en cuanto  corresponden a las ideas ejemplares ya que estas son la fuente del ser  es el fundamento  firme de la certeza y la ciencia
Las ideas ejemplares son modelos eternos e inmutables en el entendimiento divino.[229]
El filosofo “miró a Cristo y al Cristianismo con ojos puramente neoplatónicos;”[230] por lo cual siempre “contemplaba a Dios como puro objeto de contemplación intelectual”[231]  por eso era de  más importante  el conocer  que el creer[232].









Bibliografía 
·         Abbagnano Nicola, Historia de la filosofía, Filosofía patrística, Barcelona Hora S. A.  1994-2000.
·         Guillermo Fraile. Historia de la filosofía II. Vol. I 1. Biblioteca de Autores Cristianos. 4° Edición Madrid 1986
·         Obras Completas de San Agustín I: Escritos filosóficos, Introducción y biografía general. Vida de San Agustín escrita por San Posidio. Soliloquios. La vida feliz. El orden. España. Editorial Biblioteca de Autores Cristianos, 1950. Tomo I
·         Confesiones. San Agustín  Libro 6, Cap. XV. Ed. Porrúa. México, 1984.
·         Obras Completas de San Agustín de Hipona Tomo III,  Del libre Albedrio B. A C. Madrid 1947
·         Obras Completas de San Agustín Tomo IV De la utilidad de creer introducción  B. A. C. Madrid 1948
·         Obras Completas de San Agustín, Tomo V, Tratado sobre la Santísima Trinidad , Biblioteca de Autores Cristianos, Madrid 1956,






[1] San Agustín, Obras completas, Introducción general. Tomo I. Biblioteca de Autores Cristianos. Madrid.  1951 Pág. 3
*“Patricio “cristiano de última hora, pertenecía a la orden de los decuriones y como tal, al  Consejo o Curia municipal”. O. C. San Posidio .Vida de San Agustín , Notas pág. 367
[2] San Agustín O. C. ob.cit.  pág. 3
[3]  Ibídem.
* San Posidio (¿?-437 d.C. Guelma, Argelia) obispo de Calama, en Numidia (hoy Guelma, en Argelia), discípulo y fiel amigo de Agustín de Hipona; estuvo  presente en la muerte de Agustín y escribió una biografía del filosofo.
[4] San Agustín O. C. ob. cit. pág.3
[5] Guillermo Fraile. Historia de la filosofía II. Vol. I Cap. I #1. Biblioteca de Autores Cristianos. 4° Edición Madrid 1986 Pág.  191
[6] Ibídem.
[7] San Agustín ob. cit. pág.305
[8] Ibídem.
[9] Guillermo Fraile. ob. cit. pág.  191
[10] Confesiones. San Agustín  Libro 6, Cap. XV. Ed. Porrúa. México, 1984. Pág.94  
[11] Ibídem.
[12] Ibídem.
[13] Ibídem.
[14] Ibídem.
[15] Guillermo Fraile  ob. cit. pág. 192
[16] Ibídem.
[17] Confesiones. S. A. ob. cit. Libro. 3. Cap. VI  pág. 35
[18] ibídem.
[19] Ibídem.
[20] Guillermo Fraile ob. cit. pág. 192
[21] Confesiones. S. A.  ob. cit. Libro 3. Cap. VI pág. 35
[22] Ibídem.
*Maniqueísmo; Religión fundada por el príncipe persa Manes (216-277) según la cual existen dos principios reguladores del universo, el Bien y el Mal, que se encuentran en constante lucha y oposición, y a los que denomina la Luz y las Tinieblas, respectivamente. Tras un largo período de tiempo la lucha se saldará con la victoria definitiva de la Luz sobre las Tinieblas. El término maniqueísmo se utiliza también habitualmente para referirse a la actitud de quienes consideran que todo es bueno o malo en términos absolutos, sin establecer ningún tipo de matiz o cualquier otra consideración
[23] Guillermo Fraile ob. cit. pág, 192
[24] O. C. San Posidio , Vida de San Agustín pág. 305
[25] *Fausto obispo maniqueo, “nacido en la ciudad de númida de Mileví algunos años antes que Agustín. Confesiones S. A.  Libro 5  Cap. III pág. 63
[26] Confesiones S. A.  ob. cit. Libro 5  Cap. III pág. 63
[27] Ibídem ob. cit. Libro 5. Cap. I  pág. 62
[28] Ibídem.
[29] Ibídem.
[30] Ibídem.
*” La Academia Nueva así llamada porque deriva de la Antigua,  academia fundada por Platón; la Nueva academia nació bajo r orientaciones escépticas de Arcesilao” (315 -241 a. C.), quien  “sostienen la imposibilidad de cualquier conocimiento”. Ibídem. ob. cit. Libro. 5 Cap. X pág. 72
[31] Ibídem.
[32] Confesiones S. A. ob. cit. Libro 5 Cap. X pág. 72
[33] Guillermo Fraile ob. cit. pág- 192
[34] Ibídem.
[35] Ibídem.ob. cit. pág. 193
[36] Ibídem. ob. cit. pág. 193
[37] Para Agustín  “La solución cristiana de la providencia y del mal y el apoyo de la filosofía neoplatónica acabaron terribles perplejidades con que se batió cuando militaba en el maniqueísmo.” San Agustín. Obras completas de San Agustín, Introducción, Del orden, Editorial Biblioteca de Autores Cristianos pág. 592
[38] Guillermo Fraile ob. cit. pág. 193
[39] Ibídem.
[40] Ibídem. ob. cit. pág. 192
[41] Ibídem.
[42] Ibídem ob. cit. pág. 193
[43] Ibídem.
[44] Ibídem.
[45] Abbagnano Nicola, Historia de la filosofía, Filosofía patrística, Barcelona Hora S. A.  1994-2000. pág.  274
[46] Ibídem.
[47] Guillermo Fraile ob. cit. pág. 193
[48] Ibídem.
[49] Ibídem.
[50] Ibídem ob. cit. pág. 194
[51] Ibídem.
[52] Ibídem.
[53] Ibídem.
[54] Ibídem.
[55] Ibídem ob. cit. pág. 195
[56] Ibídem.
[57] San Agustín O. C. ob. Cit. Pág 44
[58] Ibídem.
[59] Guillermo Fraile ob. cit. pág. 195
*”La invasión de los vándalos se abatió en el 428  sobre África romana”Abbagnano Nicola ob. cit. pág. 275
[60] Abbagnano Nicola ob. cit. pág. 275
[61] Ibídem.
[62] Ibídem.
[63] O. C. , San Posidio  Vida de San Agustín  Cap. XXXI pág. 363
[64] Guillermo Fraile. Historia de la filosofía II. Vol. I, Biblioteca de autores cristianos. 4° Edición Madrid 1986 Pág.  192
[65] Obras Completas de San Agustín I: Escritos filosóficos, Introducción y biografía general. Vida de San Agustín escrita por San Posidio. Soliloquios. La vida feliz. El orden. España. Editorial Biblioteca de Autores Cristianos, 1950. Tomo I pág.381
[66] Ibídem.
[67] Ibídem.
[68] Ibidem.
[69] Guillermo Fraile.  ob. cit. Pág.  224
[70] O. C. de San Agustín, Tomo I, De la vida feliz. Introducción, ob. cit. pág.539
[71] Ibídem.
[72] Ibídem.
[73] Ibídem. Introducción, Del orden,  ob. cit. pág. 589
[74] Ibídem.  pág. 594.
[75] Ibídem. pág. 590
[76] Ibídem.
[77] Ibídem. Introducción  Soliloquios,  ob. cit.  pág. 429
[78] Ibídem.
[79] Abbagnano Nicola, Historia de la filosofía, Filosofía patrística, Barcelona Hora S. A.  1994-2000.  pág. 276
[80] Guillermo Fraile ob.cit, pág. 210
[81]  Obras Completas de San Agustín Tomo III De la naturaleza del bien  Introducción , Editorial Biblioteca de Autores Cristianos, Madrid, 1947  pág. 977
[82] O. C. Tomo I  ob. cit. págs.. 775-776

* Agustín  busca explicar los principios de la fe cristiana, y los defiende de las herejías. En sus escritos contra los pelagianos refutaba la idea de negar o limitar la gracia divina.  Abbagnano Nicola ob. cit. pág. 276.
[83] O. C. Tomo I ob. cit. pags 775-776
[84] Ibídem
[85] Ibídem pág. 775
[86] Ibídem.
[87] Ibídem pág. 776
[88] Ibídem.
*Agustín “se encontraba en disposición de abordar el problema del mal en el mundo y combatir victoriosamente las afirmaciones del los maniqueos,” para el filósofo Dios es incorruptible, el reconocimiento  de él, quitaba  “todo fundamento  a la afirmación  maniquea  de un principio  del mal” Abbagnano N. ob. cit, pág. 283.  El maniqueísmo fue una religión fundada por el príncipe persa Manes (216-277) según la cual existen dos principios reguladores del universo, el bien y el mal, que se encuentran en constante lucha y oposición, y a los que denominan la luz y las tinieblas, respectivamente.
[89] O. C. Tomo I ob. cit. págs.. 776 -777
[90] Ibídem pág. 777
* Agustín se opuso a los donatistas que promulgaban una iglesia africana independiente y hostil al Estado romano el Donatismo es  movimiento religioso católico romano del siglo IV se originó en Numida la actual Argelia  que nació como una reacción ante el relajamiento de las costumbres de los fieles. Iniciado por Donato, obispo de Cartago en el norte de África, aseguraba que sólo aquellos sacerdotes cuya vida fuese intachable podían administrar los sacramentos, entre ellos el de la conversión del pan y el vino en el cuerpo y la sangre de Cristo (eucaristía), y que los pecadores no podían ser miembros de la Iglesia
*Arrianismo; Conjunto de doctrinas  desarrolladas por Arrio, sacerdote de Alejandría, por algunos de sus discípulos. Según Arrio,   Cristo es la primera criatura creada por Dios, pero no era Dios en sí mismo. Una vez que la Iglesia definió el dogma de la divinidad del Hijo y, posteriormente, de la Trinidad, el arrianismo fue condenado por hereje por la iglesia católica. Este término también se utiliza en ocasiones de forma inexacta para aludir a aquellas doctrinas que expresen negación de la naturaleza divina de Jesús.
[91] O.  C. Tomo I pág. 777
[92] Ibídem.
[93] *Los escritos atribuidos son manuscritos que figuran como anónimos y que  se le atribuyen por su autoridad indiscutible pero que al no ser escritos por él están entre los libros pseudo-agustinianos, apócrifos o atribuidos, a estos libros ”no solo sus escritos y su pensamiento son citados, traducidos y parafraseados continuamente , sino que el peso y la influencia de su autoridad firme e indiscutible es suficiente con su nombre para valer dar cobertura y evitar  sospechas  de ortodoxia a escritos anónimos, tanto en prosa como en verso”.  Obras completas  de San Agustín Tomo XLI, Presentación, Biblioteca de Autores Cristianos  Madrid 2002  pág. XXIII
[94] Guillermo Fraile. Historia de la filosofía II. Vol. I, Biblioteca de autores cristianos. 4° Edición Madrid 1986 Pág.  192
[95] Obras Completas de San Agustín I: Escritos filosóficos, Introducción y biografía general. Vida de San Agustín escrita por San Posidio. Soliloquios. La vida feliz. El orden. España. Editorial Biblioteca de Autores Cristianos, 1950. Tomo I pág.381
[96] Ibídem,  Introducción general ob. cit. pág. 78
[97] Guillermo Fraile. ob. cit. Pág. 198
[98] O. C. de San Agustín, Tomo IV, Costumbres de la iglesia católica Libro I Cap. 5, 8,   B. A. C. Madrid, 1948 pág. 269
[99] Ibídem.
[100] O. C. de San Agustín Tomo IV, De la verdadera religión 52, 101  ob. cit. pág. 195
[101] Ibídem.
[102] Ibídem  ob. cit. pág. 273
[103] O. C. de San Agustín Tomo III Contra los académicos, Libro I Cap. 2 B. A. C. Madrid, 1947 pág. 83
[104] Ibídem.
[105] Ibídem.
[106] Ibídem.
[107] Obras Completas de San Agustín, Tomo V, Tratado sobre la Santísima Trinidad , Biblioteca de Autores Cristianos, Madrid 1956, libro XII Cap 4, 4 pág.657
[108] Ibídem.
[109] Guillermo Fraile. ob. cit. Pág. 221
[110] Ibídem.
[111] O. C. de San Agustín Tomo IV, De la verdadera religión 30, 54 ob. cit. pág. 135
[112] Guillermo Fraile ob. cit. pág. 221
[113] Ibídem  ob. cit. 197
[114] Ibídem.
[115] Ibídem.
[116] Ibídem.
[117] Ibídem.
[118] Ibídem.
[119] Ibídem ob. cit, pág. 198
[120] Ibídem.
[121] O. c. de San Agustín ,Tomo V, De la santísima trinidad Libro I Cap. 1, 3 ob. cit, pág. 131
[122] Abbagnano Nicola, Historia de la filosofía, Filosofía patrística, Barcelona Hora S. A.  1994-2000. pág.  273
[123] O.C. Tomo I, Del orden  Libro I Cap.1, 3  ob. cit.pág. 596
[124] Ibídem.
[125] Guillermo Fraile. ob. cit. Pág.  208
[126] Ibídem ob. cit. pág.  205
[127] Confesiones. San Agustín  Libro X, Cap. XXIV. Ed. Porrúa. México, 1984. Pág 169
[128] Guillermo Fraile ob. cit. pág. 205
[129] Ibídem.
[130] Ibídem.
[131] Ibídem ob. cit. pág. 210
[132] Ibídem.
[133] Ibídem ob. cit. pág. 202
[134] O. C. de San Agustín, Tomo V, Tratado sobre la Santísima Trinidad, libro XIV Cap 1, 3  ob. cit. pág.769
[135] Ibídem. Libro XII Cap. 15, 25  pág. 693
[136] Ibídem.
[137] Guillermo Fraile ob. cit. pág.207
[138] Ibídem ob. cit. 206
[139] Ibídem.
[140] Ibídem ob. cit. pág. 207
[141] Ibídem ob. cit. pág. 208
[142] O. C. de San Agustín, Tomo I Libro I Cap. 14, 24 pág. 465
[143] Guillermo Fraile ob. cit. pág. 205
[144] Ibídem.
[145] Abbagnano Nicola, ob. cit. pág. 279
[146] Guillermo Freile  ob. cit. pág. 207
[147] Ibídem.
[148] Obras Completas de San Agustín Tomo I Soliloquios. Libro II, Cap. V. Obras completas, Tomo I. B.A.C pág. 481
[149] Ibídem Libro II Cap. IV ob. cit.  pág. 483.
[150] Abbagnano Nicola, ob. cit. pág. 279
[151] Obras Completas de San Agustín de Hipona Tomo III,  Del libre Albedrio Libro II Cap. XIII B. A C. 1947 pág. 369
[152] Ibídem.
[153] Ibídem.
[154] Ibídem. Del libre Albedrio Libro II Cap. XII ob. cit.  pág 367
[155] Ibídem.
[156] Ibídem.
[157] Ibídem. Libro II Cap. XIII ob. cit.  pág. 369
[158] Ibídem.
[159] Abbagnano Nicola, ob. cit. pág. 279
[160] O. C. de San Agustín Tomo III Del libre albedrío, Cap. XIII ob. cit. pág. 371
[161] Ibídem.
[162] Ibídem ob. cit. pág. 373
[163] Ibídem.
[164] Confesiones Libro X Cap. X  pág. 160
[165] Ibídem.
[166] Ibídem.
[167] Ibídem.
[168] Ibídem.
[169] Ibídem Cap. IX
[170] Ibídem.
[171] Ibídem.
[172] Ibídem.
[173] Ibídem.  Libro X Cap. XVII ob. cit. pág. 165
[174] Ibídem.  Libro X Cap. XXIV ob. cit. pág. 169
[175] Ibídem  Libro X  Cap. XXVI ob. cit. pág. 170
[176] Guillermo Fraile  ob. cit. pág. 225
[177]  San Agustín, La ciudad de Dios XI, 26
[178] Guillermo Fraile  ob. cit. pág. 225
[179] O. C. de San Agustín, Tomo IV De la verdadera religión 40, 74 ob. cit. pág. 161
[180] Ibídem.
[181] O. C. de San Agustín, Tomo V De la Santísima Trinidad X 10, 15 pág. 601
[182] Guillermo Fraile ob. cit. pág. 212
[183] Ibídem.
[184] Ibídem.
[185] ibídem
[186] O. C. de San Agustín Tomo IV De la utilidad de creer introducción  B. A. C. Madrid 1948 pág. 823
[187] Ibídem. Cap. II  ob. cit. pág. 833
[188] Ibídem.
[189] Ibídem Libro I Cap. 5, 12 ob. cit. pág. 849
[190] Ibídem Libro I Cap. 9, 22 ob. cit. pág. 865
[191] Ibídem.
[192] Ibídem.
[193] Abbagnano Nicola, ob. cit. pág 283
[194] Ibídem. ob. cit. pág. 284
[195] Ibídem. ob. cit. pá.g 283
[196] Ibídem.
[197] Ibídem ob. cit. pág. 284
[198] O. C. de San Agustín Tomo IV De la utilidad de creer introducción   Libro I Cap. 1 ob. cit. pág 829
[199] Ibídem.
[200] Ibídem.
[201] Ibídem  Libro I Cap. IV 4, 10 ob. Cit. pág. 845
[202] ibídem
[203] O. C. de San Agustín, Tomo I, Vida de San Agustín, Apéndices ob. cit. pág. 381
[204] Ibídem ob. cit. pág. 382
[205] Ibídem. ob. cit. pág. 381
[206] Guillermo Fraile ob. cit. pág 223
[207] Ibídem.
[208] Ibídem.
[209] Ibídem ob. cit, pág. 222
[210] Ibídem.
[211] O. C. de San Agustín, Tomo III Del maestro, Libro XI Cap.XII ob. cit. pág. 745
[212] Ibídem.
[213] Guillermo fraile ob. cit. pág. 222
[214] O. C. de San Agustín, Tomo I soliloquios Libro I Cap. I, 5 pág. 437
[215] Guillermo fraile ob. cit. pág. 222
[216] Ibídem.
[217] O. C. de San Agustín, Tomo V, De la Santísima Trinidad Libro XIV Cap. 5, 8 ob. cit. pág. 779
[218] Ibídem.
[219] Ibídem XIV 5, 7 ob. cit. pág. 777
[220] O. C. de San Agustín, Tomo I, Vida de San Agustín, Apéndices ob. cit. pág 380
[221] Ibídem.
[222] Guillermo Fraile ob. cit.  pág. 212
[223] Ibídem.
[224] Ibídem.
[225] Ibídem.
[226] Ibídem
[227] Ibídem.
[228] Ibídem ob. cit, pág. 213
[229] Ibídem.
[230] O. C. de San Agustín Tomo I, Vida de San Agustín, Apéndices ob. cit. pág. 381
[231] Ibídem.
[232] Ibídem.

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